El metro más corto de todos
Y se encontraban ahí a solo un metro, un metro lleno de incertidumbre, falto de sinceridad porque ambos querían estar sobre los labios del otro y fingian con una suprema hipocresía no demostrar que eso sentían, pero ya ves que las cosas flotan en el aire y por ende ella no sabía que él le daba toda la fuerza para escucharla gritar, pero así es esto, las decisiones más difíciles son las que más valen la pena, quizá el destino no los quiere juntos, quizá merecen las cosas como son, sin un plus entre lo que sienten, entre lo que quieren, siendo lo que nunca han sido, aunque él solo vaya a soñar con ella.
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